Los animales salvajes no han sido domesticados por las personas, con lo que
muestran su comportamiento natural.
Viven el medio salvaje, ya sea, bosques, selvas, campos, sabanas o
desiertos. Los animales salvajes pueden también vivir en los ambientes creados
por el hombre, como el campo o el jardín, como es el caso de numerosas aves que
viven en los jardines.
Como animales salvajes, tenemos el león, el elefante, el lobo, el canguro,
el águila, entre otros muchos mamíferos, aves y además vertebrados. Pero son
también animales salvajes aquellas criaturas más pequeñas como el escorpión, la
araña, las mantis religiosa, la luciérnaga, etc.
Son animales salvajes tanto los vertebrados como los invertebrados.
El canguro
Este mamífero marsupial presenta tres especies: el
canguro rojo, el gris oriental y el gris occidental. Sus diferencias radican
básicamente en el origen geográfico y el tamaño. El primero es el más grande de
todos y ocupa las zonas áridas de Oceanía, puede pesar hasta 85 kg. El segundo,
se encuentra en la zona oriental y, por último, el gris occidental, es el más
pequeño de todas las especies y se ubica en las áreas costeras del sur de
Australia. Se trata de un animal herbívoro y desarrolla su vida prácticamente
en horas nocturnas. Durante el día suele descansar hasta llegar el atardecer,
momento en el que se dedica a alimentarse, o bien antes de ponerse el sol.
Mantis Religiosa
Este insecto tiene su origen en el sur de Europa y
pertenece a la familia Mantidae. Presenta una longitud de entre 4 a 6 cm y se trata
de una especie terrestre y diurna. Tiene la capacidad de girar la cabeza hasta
180 grados, además de dos ojos compuestos y tres ocelos en el medio que le
facilitan un campo visual mayor. Sus patas delanteras poseen unas espinas para
poder atrapar y sujetar sus presas y las traseras son cuatro. También están
provistas de alas.
El oso pardo
El oso es un mamífero de gran tamaño.
Su pelaje, de color pardo, le protege del frío y del
calor.
La zarpa del oso le permite realizar variadas
actividades, desde escalar un árbol hasta pescar.
El oso es diurno o bien nocturno, pero cuando es
perseguido por el hombre se vuelve exclusivamente nocturno, para escapar del
acoso.
El oso es un animal territorial, sin embargo, tolera
bastante bien la presencia de otros osos.
Este mamífero no realiza una auténtica hibernación.
El oso es un buen nadador, le gusta mucho el agua y
hasta sabe bucear.